Educadora Social. Especialista en Violencia de Género y en Orientación Sociolaboral. Mediadora Familiar, Civil y Mercantil.
El crecimiento personal es el área de la psicología que se enfoca en ayudarnos a encontrar y desarrollar nuestras fortalezas, para ser la mejor versión de nosotros mismos. Nos ayuda a deshacernos de las limitaciones psicológicas que nos atan y nos permite alcanzar nuestro máximo potencial, la mejor versión de nosotros mismos. Es la capacidad que tenemos las personas para aprender de nosotras mismas. Está centrado en aquellos aspectos de nuestra vida que no nos hacen evolucionar sino crecer, transformarnos. Es un cambio vertical que potencia nuestro bienestar interior, nos permite expandirnos.
El crecimiento personal se centra en el potencial del ‘yo interior’, conlleva más introspección y pone el foco en la relación que tenemos con nosotros mismos, mientras que el desarrollo personal hace referencia al cultivo de todo aquello que exteriorizamos, los cambios en el hacer de las personas, lo que hace que las personas evolucionen y mejoren y para trabajarlo se diseña un plan de acción en el que se busca conseguir resultados en distintos planos de nuestra vida.
Por tanto, en este artículo nos centraremos en el crecimiento personal, en el yo interior.
Principios básicos del crecimiento personal
Las personas que se involucran activamente en un proceso de crecimiento personal no solo reportan una mayor satisfacción en sus vidas sino que además mantienen relaciones interpersonales más asertivas, logran una mayor autonomía y tienen propósitos vitales bien estructurados.
Sin embargo, el crecimiento personal no se produce de un día a otro, es el resultado de un proceso de aprendizaje que nos permite avanzar paso a paso para lograr la mejor versión de nosotros mismos. Los cambios en el comportamiento deben estar respaldados por una transformación interior más profunda a nivel de personalidad, lo cual significa que hay un esfuerzo consciente por mejorar cada día.
De hecho, las investigaciones realizadas han determinado que existen algunas características básicas en las cuales debemos trabajar para lograr un cambio positivo y permanente:
1. El compromiso con el desarrollo
2. La apertura a las nuevas experiencias
3. La perseverancia para alcanzar nuestro potencial.
Por eso, es importante comprender que el crecimiento personal se basa en tres principios fundamentales:
- Integral: Somos una unidad, lo cual significa que aunque nos enfoquemos en desarrollar solo ciertas competencias o activar patrones de pensamiento más funcionales, estos cambios repercutirán favorablemente en otras esferas de nuestra personalidad y vida cotidiana.
- Progresivo: implica un nivel de desarrollo gradual, a través del cual iremos atravesando por diferentes fases que nos permiten ganar en autoconocimiento y autocontrol. Sin embargo, no se debe entender como un proceso lineal, es necesario estar preparados para los retrocesos, que forman parte del propio desarrollo.
- Continuo: no termina nunca porque cambiamos continuamente, por lo que siempre podemos seguir desarrollando las habilidades y competencias que nos permitan ampliar nuestra zona de confort, afrontar los nuevos retos y mejorar nuestro bienestar psicológico
Acciones y claves
Pero, ¿qué podemos hacer?, ¿qué acciones podemos llevar a cabo para posibilitar un cambio hacia el bienestar y la autosatisfacción?
A continuación puedes encontrar claves que te permitirán transformar tu vida de manera positiva:
Autoconocimiento, autoconciencia y autocuidado
Puesto que el crecimiento de una persona es un proceso individual y personal, el primer paso para transformar tu vida es conocerte a ti mismo. El autoconocimiento significa evaluar el propio sistema de valores y creencias, detectar los puntos fuertes y débiles, y ser consciente de las propias motivaciones y deseos.
Tomarte un tiempo para averiguar qué es lo más importante para ti, qué es lo que quieres lograr en tu vida, qué te hace feliz, cuáles son tus sueños o en qué momento de tu vida te encuentras es el inicio de tu transformación y tu crecimiento y también desarrollo personal. Esto te ayudará a tener una perspectiva más realista de quién eres y dónde quieres ir.
El autocuidado es esencial para el desarrollo personal. Dedica tiempo para cuidar de tu bienestar físico y emocional. Esto incluye la práctica regular de la meditación, el ejercicio y la alimentación saludable.
Desafía tus creencias limitantes y sal de tu zona de confort.
La zona de confort es un estado mental que no permite el crecimiento personal y es un hábito que puede ser perjudicial para lograr un alto grado de satisfacción en el modo de vivir la vida, es el lugar donde se está cómodo. Cuando decides dar un paso al frente y cambiar tu vida, pero algo te impide avanzar y la ansiedad te mantiene anclado a esa situación que te resulta cómoda, estás poniendo en riesgo tu crecimiento personal. Esto supone un gran coste emocional y un impedimento para seguir con tu transformación hacia un mayor bienestar.
Salir de la zona de confort es no temer a la incertidumbre y confiar en las posibilidades de uno mismo. Pero esto no siempre es fácil. Cuando somos jóvenes, somos más propensos a arriesgarnos, pero a medida que nos hacemos mayores aprendemos a temer al fracaso, pudiendo llegar a la indefensión e incluso a la paralización. Para seguir creciendo, es necesario superar el miedo al fracaso y las creencias limitantes que nos impiden desarrollarnos.
3. Estar abierto al cambio y aprender constantemente
Salir de la zona de confort requiere cambiar las creencias limitantes por creencias potenciadoras, porque, en muchas ocasiones, estas limitaciones las pone la mente.
Si las limitaciones las pone la mente, eso quiere decir que la propia mente también puede ayudarnos a llegar más lejos, a superar las barreras o los obstáculos que pueden ir apareciendo en nuestro día a día. Estar abierto al cambio y tener voluntad para llevarlo a cabo es un requisito indispensable para poner en marcha cualquier transformación.
El aprendizaje continuo es una parte integral del desarrollo personal, que ayuda también al crecimiento personal. Lee libros, asiste a cursos y conferencias, mantente al día con las últimas investigaciones en psicología y desarrollo personal, escucha y atiende todo lo que puedas.
Ten un plan de acción y establece objetivos claros
El autoconocimiento ayuda a definir los objetivos de manera realista y permite establecer prioridades. Pero para lograr los objetivos, es necesario planificar los movimientos y definir la manera de alcanzar las metas que consideramos que son importantes para nosotros.
Cuando sepas qué es importante para tu felicidad y tu bienestar, debes establecer metas a corto, medio y largo plazo para poder pasar a la acción. De nada sirve querer transformarse si no hacemos nada para cambiar. Ahora bien, recuerda que las metas pueden ir cambiado, así que debes ser flexible. Lo importante es ir paso a paso para lograr la transformación.
Comienza por definir tus objetivos. ¿Qué áreas de tu vida te gustaría mejorar? ¿Qué metas te gustaría alcanzar? Establecer objetivos claros te dará una dirección definida.
Aprende de tus experiencias: responsabilízate y abandona el victimismo
Es frecuente que muchas personas no se responsabilicen de los problemas que les afectan y busquen la causa fuera o culpen a otros de sus errores. ¿Por qué a mí me pasa eso? ¿por qué no reconocen lo que hago? o ¿por qué no cambia la otra persona?... es más fácil hacerse la víctima y esperar a que las cosas sean de otra manera.
Sin embargo, la responsabilidad (o como dicen los expertos en crecimiento personal: la “respons-habilidad”), entendida como la habilidad para responder, es esencial en cualquier proceso de cambio. Tiene que ver con el empoderamiento, el autoliderazgo, en cómo respondemos a los sucesos que ocurren a nuestro alrededor, y es vital para la transformación de nuestra vida. “Respons-habilizarte” frente al cambio es una de las claves del crecimiento personal.
Cada experiencia, ya sea positiva o negativa, puede ser una oportunidad de aprendizaje. Reflexiona sobre tus experiencias y considera cómo puedes crecer a partir de ellas.
6. Busca apoyo
No tienes que recorrer el camino del crecimiento personal solo. Busca el apoyo de amigos, familiares o un profesional de la psicología o la terapia para ayudarte en tu viaje.
Beneficios
Trabajar nuestro crecimiento y desarrollo como personas nos lleva a diferentes beneficios como cambiar nuestra vida para superar retos y alcanzar nuestros objetivos, conocernos mejor, empoderarnos y mostrar todo nuestro potencial, atrevernos a hacer cosas nuevas saliendo de nuestra zona de confort y nos da la oportunidad de mostrarnos como realmente somos.
El crecimiento personal es progresivo. Para entenderlo mejor podemos decir que es el camino que te lleva a dónde quieres llegar siendo consciente de donde partes.
Dijo Lao Tse que cualquier largo viaje empieza con un pequeño paso, así que ¿te animas a dar ese paso hacia tu crecimiento personal? Porque, como dijo Gail Sheehy: si no cambiamos, no crecemos. Si no crecemos, realmente no estamos viviendo..